domingo, 19 de agosto de 2012

DESCUBRIENDO EL CIELO - VII: Cosmos (Cap. 4)

Nada mejor para aliviar los calores de nuestro querido "astro rey" que visualizar una nueva entrega de mi serie de cabecera: Cosmos. Aquí os dejo un nuevo episodio: el capítulo 4, titulado "Cielo e Infierno".


sábado, 21 de enero de 2012

DESCUBRIENDO EL CIELO - VI: Cosmos (Cap. 3)

No se me ocurría mejor excusa para publicar la primera entrada de 2012 en este Planeta Prozac, que volver a revisar otro fantástico capítulo de nuestra serie de cabecera: en este tercer capítulo, el maestro Sagan nos habla de "La armonía de los mundos".





jueves, 22 de diciembre de 2011

TERCER ANIVERSARIO DE "PLANETA PROZAC"

No me había dado cuenta, pero repasando una antigua entrada, me he dado cuenta que hoy hace justo 3 años que la vida surgió en este Planeta Prozac. Han pasado muchas cosas desde entonces, algunas buenas, otras mejores... y algunas no tan buenas. Pero el espíritu de los habitantes de este lejano planeta se mantiene inalterable.

Hemos tenido que sobrevivir a terremotos, tormentas financieras, lluvias torrenciales y vientos huracanados, pero también hemos disfrutado de cielos azules, largas puestas de sol, y espectaculares cielos estrellados.

Siempre he preferido quedarme con lo bueno, así que continuaré enamorándome de todo aquello que hace que me sienta bien, que me hace vibrar, que hace sentirme vivo... Esas ansias por saber más, por descubrir las pequeñas cosas, por diferenciar qué es lo realmente importante, y sobretodo, por poder seguir disfrutando de todos y cada uno de los amaneceres y atardeceres que mis ojos puedan contemplar a orillas de mi estanque, que espero que también sea el tuyo.

Y de mientras, este Planeta Prozac continuará su camino atravesando el Universo, espero que por muchos años, en busca de esas luces que iluminen todas nuestras dudas: sin duda, será un largo viaje...

sábado, 3 de septiembre de 2011

DESCUBRIENDO EL CIELO - V: Perseo, Aries y Triángulo: Trío de Constelaciones

El pásado día 22 de agosto, a eso de las 00:30 horas (U.T.), me dispuse a atacar una nueva zona del cielo que, hasta ahora, no había mirado: las constelaciones de Perseo, Aries y Triángulo.


La constelación de Perseo es conocida desde la antigüedad, ya que era una de las 48 constelaciones de Ptolomeo. Por desgracia, no pude verla bien en la anterior observación, la de la noche de la lluvia de las Perseidas, que toman el nombre al localizarse en esta constelación. Es una constelación bonita de ver.

Me llamó especialmente la atención su estrella principal, Mirphak (Alfa Persei). Se trata de una supergigante amarilla, de magnitud 1.79, así que es visible a simple vista muy fácilmente. Al enfocar con mis prismáticos 10x50, me llamó la atención la zona que rodea a Mirphak. Las estrellas que la rodean tienen una forma característica, y con los binoculares puedes enfocarlas muy bien. Como se puede apreciar en la imagen que adjunto, es una zona que el aprendiz como yo disfrutará ya que con poquitos aumentos, tenemos muchas estrellas fáciles de localizar y aprender.












También me llamó la atención Algol (beta Persei), situada a la derecha de Mirphak. Se trata de una estrella variable, más concretamente del grupo de variables eclipsantes. Tiene un color blanco-azulado, y su magnitud aparente varía entre 2.12 y 3.39, en un período de 2.87 días (datos Wikipedia).

Y fué investigando las inmediaciones de Algol, que con mis prismáticos me topé con la constelación de Triángulo (ó Triangulum). Es una constelación pequeña, con estrellas no muy luminosas, pero agradecida a la vista de binoculares. Sus estrellas principales son Mothallah (alfa Trianguli) y Deltotron (beta Trianguli). Sin embargo, el objeto más conocido de esta constelación es la Galaxia del Triángulo, también conocida como M33. Se trata de una galaxia que forma parte del Grupo Local, y es la tercera en importancia de este grupo, después de nuestra Vía Láctea y Andrómeda. Por desgracia, toda esta información la supe días después, mientras preparaba esta entrada. Eso sí, como se trata de un objeto de magnitud 5.8, se ha convertido en uno de los próximos objetivos de mis observaciones, y máxime cuando me encuentro con la limitación de aumentos por no tener AÚN telescopio (todo se andará, aunque de momento prefiero seguir los consejos de los veteranos, y me dedico a aprender lo que veo con los prismáticos, que no es poco!!!)

Al lado de Triángulo, nos topamos con la constelación de Aries, una de las constelaciones zodiacales, por lo que se encuentra entre Piscis y Tauro. Al contrario de lo que yo pensaba, se trata de una constelación también pequeña. Sin embargo, casi todas sus estrellas principales tienen nombre propio, cosa que me gusta: me parece más "romántico" un nombre propio que no el normalizado (alfa Arietis, beta Arietis, etc.). En primer lugar, y con magnitud 2.01 me encontré con Hamal (alfa Arietis), una gigante anaranjada, que según Wikipedia, tiene un bonito conjunto de estrellas que la rodean. Sin embargo, yo no pude captarlo (o se me pasó por alto). En una nueva observación, dirigiré mis prismáticos a esa zona. Otras estrellas fácilmente visibles son Sheratan (beta Arietis), Mesarthim (gamma Arietis) y Botein (delta Arietis). Como ya he dicho, espero profundizar en esta constelación en una próxima noche astronómica, ya que tiene muchas estrellas fáciles de ver, y la orientación de mi terraza es perfecta para verla, aunque los horarios sean un poco intempestivos, sobretodo porque hasta que no está un poco más alta, me la tapa un edificio que tengo justo enfrente.

Y para terminar la noche, y dado que me dediqué casi exclusivamente a esa zona del Este de mi cielo, quise echar un último vistazo al Norte, a ese conjunto de constelaciones que ya comienzo a tener bastante por la mano. Ésto es lo que se veía hacia el Norte desde mi terraza:


Como podéis ver, fué una noche muy bonita para mí, porque pude tomar contacto con nuevas constelaciones, y sobretodo, para empezar a posicionarlas y aprender qué objetos la forman. Una noche muy provechosa, por suerte... A eso de las 02:00h (U.T.), dí por concluida la noche de observación, con una temperatura muy agradable, y un cielo que invitaba a seguir unas horas más.

sábado, 20 de agosto de 2011

DESCUBRIENDO EL CIELO - IV: Mis primeras lunas de Júpiter



La noche del 12 al 13 de agosto, aprovechando la lluvia de las Perseidas, planifiqué una noche de astronomía. Por cuestiones laborales, no tenía la posibilidad de marchar fuera del radio de acción de nuestra odiada contaminación lumínica, así que mis espectativas, la verdad, no eran muchas...

Pertrechado con unos prismáticos 10x50, me dediqué a ver la Luna. Por momentos, las nubes amenazaban con tapar el cielo, y a ratos así lo hacían. De la lluvia de las Perseidas poco puedo hablar. Tras localizar de manera más intuitiva que real la constelación de Perseo debido a la enorme Luna Llena que iluminaba el cielo, me senté a esperar tan ansiado espectáculo, pero el resultado fué casi nulo: apenas 2 fogonazos muy tenues... Debido a las malas condiciones que tenía, la verdad, ya me dí por satisfecho.

Y entonces, a eso de las 02h. de la mañana (00h. T.U.), una luz brillante en el cielo llamó mi atención: Júpiter. Por suerte, las nubes me dieron una pequeña tregua, y se instalaron sobre la Luna, tapándola y permitiéndome apuntar con mis prismáticos apoyados en un improvisado trípode, y... allí estaban: junto a Júpiter, 3 puntos muy débiles pero perfectamente alineados. Fué un momento importante para mí. No tenía datos sobre cuáles eran, pero lo que me extrañaba es que me faltaba una, ya que según tenía entendido, eran 4 las lunas galineanas, así llamadas por ser Galileo quien las divisó el 7 de enero de 1610. Como curiosidad, decir que Galileo las llamó Júpiter I, II, III y IV, y fué el astrónomo Simón Marius quien les otorgó el nombre con las que las conocemos actualmente: Io, Europa, Ganímedes y Calisto.

Algo "mosca" por esta falta, al día siguiente consulté el Stellarium, y los datos que me dió sirvió para localizar y poner nombre a los "puntitos" que pude ver la noche anterior. Sin embargo, no me resolvía el "misterio": seguía faltándome una luna...


No sería hasta algún día después, y tras consultar en el foro www.astronomo.org , pude entender qué había pasado: Io no lo había podido ver ya que estaba transitando por Júpiter, con lo que ahí tenía resuelto el misterio. Aquí os dejo una foto de "hyomismo" del foro Astrónomo.org, que retrata ese momento (véase el puntito negro sobre Júpiter: ahí esta Ío):


Éste fué mi primer contacto con "otras lunas". Espero que, con el tiempo, pueda profundizar un poco más en estos objetos, y con más medios. Sin duda, una de mis noches "inolvidables" en mi aprendizaje astronómico...

De momento, y para ir profundizando un poco en estas lunas, os adjunto algo de información de ellas (vía Wikipedia):

Ío

Es el satélite galineano más cercano a Júpiter. Las fuerzas de marea provacadas por la fuerte atracción gravitatoria de Júpiter son tan marcadas que provocan un vulcanismo muy activo, cuya consecuencia es la ausencia total de cráteres de impacto. Su superficie está cubierta de azufre.

Europa

El más pequeño de los satélites galineanos, sin embargo quizás sea el más interesante. Está cubierto por una capa de hielo, y tiene muy pocos cráteres, lo que indica una superficie relativamente joven. Se piensa (y existen bastantes evidencias a favor) que debajo de la "cáscara" de hielo sólido de su superficie debe existir un océano de agua líquida. Las estimaciones del grosor de la cáscara de hielo van desde 10 a 100 kilómetros.

Ganímedes

No sólo es el satélite más grande de Júpiter, sino también el más grande del Sistema Solar. Se especula que Ganímedes también pueda tener un océano escondido debajo de su superficie, cubierta de hielos. Ganímedes está compuesto de silicato y hielo, con una corteza de hielos que flota encima de fangoso manto.

Calisto

Es el satélite galineano más lejano de Júpiter, y es también el que tiene la superficie más vieja, ya que está saturada de cráteres.


sábado, 11 de junio de 2011

DESCUBRIENDO EL CIELO - III: Cosmos (Cap. 2)

En la entrada de hoy volvemos con la serie Cosmos, esta vez con su segundo capítulo: Una voz en la fuga cósmica.

Espero que lo disfruteis!

















lunes, 6 de junio de 2011

DESCUBRIENDO EL CIELO - II: Buscando apoyo...

Esta entrada la dedicaré a hacer mención a las webs, podcast y otros soportes que me están siendo de gran ayuda en este lento aprendizaje. Estoy planteándome incluir un apartado de links en la página principal donde iré añadiendo aquellos que vaya descubriendo...

En el apartado de los podcast, hay uno sobretodo que me tiene enganchado. Se trata del programa "Un punto azul", de la Agrupación Astronómica Jerezana Magallanes, de Jerez de la Frontera. El programa, dirigido por Alfonso Saborido, se emite a través de Frontera Radio, pero yo lo sigo desde su página de Facebook, o desde su canal de Ivoox. Gracias a sus contenidos, y al característico humor de sus contertulios, hacen que se me haga muy pero que muy ameno cada uno de los programas, y aunque a veces se me escapan algunos temas, dado que mi nivel aún es un poco pobre, siempre logras quedarte con ideas y conceptos nuevos. Sin duda, es un programa que recomiendo enormemente... Felicidades, Alfonso y Cía.!!!

Otra web que quería mencionar es el foro "Misterios de la ciencia". Una palabra lo define: brutal. Brutal por la cantidad y cantidad de informaciones, opiniones, enlaces a programas de radio y televisión, noticias... En fin, es para entrar y pasarte horas y horas leyendo. Además, la acogida por parte de los moderadores es genial y muy cálida. Un lugar que recomiendo visitar y disfrutar...
Podeis encontrarlo en Misterios de la ciencia.

Por último, quería recordar que existe un amplio abanico de programas y web donde aprender las constelaciones, nebulosas, planetas, etc. Yo recomiendo el programa Stellarium, un software gratuito y que me está haciendo disfrutar del cielo increíblemente. Es muy pero que muy sencillo de usar, y muy vistoso. Simplemente lo configuras dándole las coordenadas del lugar donde estás, y... a disfrutar del cielo. A mí me está ayudando mucho a la hora de localizar lo que tengo delante de los ojos en cada momento. Como dice Alfonso Saborido, de Un Planeta Azul, es fantástico para hacer "astronomía de salón". Me resulta muchísimo más vistoso que el Sky, de Google y otros como el Celestia... así que es mi primera opción.

Creo que, para ir abriendo boca, no está mal... En otras entradas iré comentando otros enlaces y programas. Y mientras, seguiremos mirando al cielo...